Caballos y toros

El toro tuvo en las tierras andaluzas un significado sagrado generalmente asociado a la fuerza, esta relación de nuestros antepasados con el toro sería el origen de ritos sacros y de diversiones y entretenimientos populares, muy extendidos durante las civilizaciones griega y romana.

En la actualidad, el campo de Cádiz, donde también prospera el toro de raza retinta, de carne tan apreciada, cuenta con más de treinta ganaderías de toros de lidia, haciendo de esta provincia andaluza un destino imprescindible para ver este animal en las dehesas y prados gaditanos. Esta ruta es una invitación para acercarnos al conocimiento de la vida del toro en su medio natural y a los trabajos de selección que siguen manteniendo la raza del toro bravo y las peculiaridades de fuerza y nobleza que lo definen.

Entre los cosos taurinos gaditanos más representativos, por su factura arquitectónica y tradición, destacan los de El Puerto de Santa María, levantado en 1880 por iniciativa de Tomás Osborne y Bóhl de Faber, lugar de celebración de numerosos festejos veraniegos; Jerez de la Frontera (1894) ; la plaza de Algeciras (1969); San Fernando (1871); La Línea de la Concepción (1883) y Sanlúcar de Barrameda (1900) donde se celebran festejos durante sus ferias y fiestas más señaladas. La pequeña plaza de toros de Villaluenga del Rosario, construida en piedra en un impresionante paisaje serrano está considerada, por la atractiva singularidad de su planta en forma de alargado polígono irregular, así como por la antigüedad de sus orígenes (siglo XVIII), como una auténtica reliquia de la arquitectura taurina.